La división entre Corea del Norte y Corea del Sur es asombrosa. Cada año, muchos norcoreanos huyen hacia el sur en busca de una vida mejor para ellos y sus familias. Sin embargo, este sueño no siempre es posible para algunos, ya que muchos norcoreanos tienen cicatrices físicas y emocionales que prohíben el éxito en una nueva sociedad extranjera. Un equipo de cirujanos plásticos se ha unido para tratar de mejorar ese desequilibrio al ofrecer procedimientos gratuitos de cirugía plástica a los desertores norcoreanos.

Obsesión de belleza

No es un secreto que la cultura surcoreana pone la belleza y la apariencia física en un alto nivel. Esta obsesión se puede ver especialmente en la ciudad capital, Seúl, donde hay cientos de clínicas para sugerir procedimientos a posibles pacientes de cirugía plástica. Además, las estaciones de metro están llenas de fotos cosméticas de procedimientos exitosos antes y después.

Este enfoque en la apariencia física atractiva puede dificultar que los norcoreanos busquen trabajo. Muchos ciudadanos que huyen a Corea del Sur tienen cicatrices visibles que los convierten automáticamente en empleados indeseables. Además, en promedio, estos norcoreanos solo hacen el 66 por ciento de lo que hacen los surcoreanos, ya que son percibidos como no calificados e inestables.

Ajustándose a la nueva cultura

Para ayudar a esta población sufriente de norcoreanos a integrarse en una nueva sociedad, un grupo de voluntarios de la Asociación Coreana de Cirujanos Plásticos decidió ayudar a los desertores deshaciéndose de sus cicatrices. Este grupo ha tratado malformaciones nasales, quemaduras e incluso ha eliminado tatuajes. Aunque este programa puede percibirse como una ayuda para los desertores, los cirujanos involucrados también tienen otros motivos.

La obsesión de la cirugía plástica de Corea del Sur está comenzando a llegar a un punto de inflexión, donde existe un estándar poco realista para la belleza. En realidad, muchos cirujanos incluso sienten que esto se ha vuelto tan extremo, que se ha desarrollado un estigma negativo en vista de la cirugía estética. Al ofrecer estos procedimientos gratuitos, los cirujanos pueden ayudar a reconstruir su estado ante los ojos del público.

Cualesquiera que sean las motivaciones, este programa ha ayudado a muchas personas a sentirse más bienvenidas en un país extranjero y a los cirujanos a borrar físicamente su pasado doloroso.